El estragón es una planta maravillosa que puede agregar una gran cantidad de sabor a cualquier jardín, huerto o cocina. Es originaria de Asia central y tiene un sabor distintivo a anís y regaliz. Es fácil de cultivar y requiere poco mantenimiento, lo que lo convierte en una excelente adición a cualquier jardín, especialmente para aquellos que buscan un cultivo de bajo mantenimiento. En este artículo, te enseñaré cómo plantar estragón en tu huerto y cómo cuidarlo para que puedas disfrutar de los beneficios de esta hierba deliciosa y saludable.
La forma más fácil de empezar a cultivar estragón es comprando plántulas ya establecidas. Puedes encontrarlas en tu centro local de jardinería o en línea. Es importante asegurarte de que las plántulas sean saludables y estén en una maceta adecuada para el transporte. También puedes comprar semillas de estragón para sembrarlas tú mismo, pero tardarán más tiempo en crecer y necesitarás tener más cuidado durante el proceso de germinación.
El estragón necesita al menos 6 horas de sol al día para crecer adecuadamente. Busca un lugar en tu huerto donde tenga acceso directo al sol. También es importante asegurarte de que el suelo tenga un buen drenaje, ya que el estragón no crece bien en suelos muy húmedos.
Antes de plantar tus plántulas de estragón, prepara el suelo aflojando la tierra con una herramienta de jardín o un cultivador. Asegúrate de que el lecho de siembra tenga al menos 15 cm de profundidad para que las raíces de la planta tengan suficiente espacio para crecer. Es importante que también añadas compost o materia orgánica para enriquecer el suelo con nutrientes adicionales.
Ahora que has preparado el suelo, es hora de plantar tus plántulas de estragón. Haz un agujero lo suficientemente grande para que quepa la maceta de la plántula y colócala en el agujero. Rellena con tierra alrededor de la planta y compacta suavemente la tierra alrededor de la base de la planta. Riega bien la planta para asegurarte de que el suelo esté húmedo.
El estragón necesita un riego constante, pero no en exceso. Mantén la tierra húmeda pero no empapada. Durante los meses de verano, el estragón puede necesitar riego diario para evitar que se seque. Durante los meses más fríos, espacia el riego cada 2-3 días.
El estragón no necesita mucha fertilización ya que crece bien en suelos bien drenados y ricos en nutrientes. Si tu suelo es pobre en nutrientes, puedes añadir fertilizante orgánico al comienzo de la temporada de crecimiento.
El estragón florece durante el verano y a menudo produce hojas más pequeñas y menos sabrosas cuando florece. Poda las flores a medida que aparezcan para evitar que el estragón se vuelva leñoso y menos sabroso. Poda también las hojas viejas y amarillentas para estimular el crecimiento.
El estragón es mejor cosecharlo justo antes de que florezca. Cosecha solo las hojas superiores de la planta. Evita cortar más de un tercio del follaje en una sola vez para evitar dañar la planta. Las hojas frescas de estragón deben tener un color verde vibrante y un aroma fuerte.
El estragón se utiliza en muchos platillos de la cocina francesa, rusa y mediterránea. Añade sabor a ensaladas, salsas, platos de pollo, pescado y verduras.
Plantar estragón en tu huerto es una forma fácil de añadir sabor y nutrición a tus comidas. Con un cuidado y mantenimiento adecuados, puedes disfrutar del sabor delicioso y aroma fresco del estragón durante todo el año. Sigue estos sencillos pasos y comparte tus platillos deliciosos con familiares y amigos.